Aunque pudiera parecer que conforme avanzaba el tiempo tras la normativa de 2014 el poderío de Mercedes se reducía paulatinamente, nada más lejos de la realidad. El año pasado tan solo dos carreras fueron vencidas por un coche no plateado, y una fue por colisión de ambas balas y otra porque el motor de Hamilton, que rodaba en cabeza, decidió que había que hacer trabajar a los bomberos. Sin embargo, tanto en 2014 como en 2015 fueron tres los Grandes Premios por temporada que, el primer año por Red Bull y el segundo con Ferrari, fueron arrebatados a Mercedes. Precisamente en el Gran Premio de Singapur de 2015 la pole se la llevó Sebastian Vettel con su Ferrari, seguido en segundo lugar de Daniel Ricciardo a lomos de su Red Bull, y al podio no subió ningún Mercedes. El año posterior la pole y la victoria fueron para Nico Rosberg, pero el alemán realizo una carrera excepcional y muy lejos de la realidad, ya que Ricciardo nuevamente quedó segundo y atravesó la meta a menos de 5 décimas del vencedor. Quizá se deba, como dice aquel, a que es un circuito donde el motor importa menos (o al menos eso se comenta en muchos bares la semana previa al evento con la esperanza de que Alonso pueda hacer un buen papel). De cualquier modo, No es el circuito predilecto de Mercedes, ya que a todos estos factores se suma sus conocidos problemas de refrigeración.
Toto Wolff conoce perfectamente la situación, por lo que ha preparado a su equipo a conciencia “identificando claramente nuestros puntos fuertes y nuestras flaquezas”. Aquel fin de semana de septiembre de 2015 fue uno de los golpes más duros sufridos por Mercedes desde que alcanzaron el trono, sin embargo, comenta Wolff, “pudimos resarcirnos con la victoria de Nico el año pasado”. El austríaco achaca su ausencia de dominio en el feudo singapurense a un circuito “de curvas y rectas cortas y asfalto bacheado” que favorece los coches con alta carga aerodinámica, a saber Ferrari y Red Bull, otra vez. Pese al (relativamente) bajo rendimiento de Mercedes en Mónaco, Wolff enaltece el papel de Mercedes en Hungría, circuito apodado el Mónaco permanente, donde realizaron progresos y consiguieron subir a Bottas al podio. “A veces estas características son inherentes al ADN del monoplaza”, zanja el Jefe de Mercedes.
Centrándose ya en la decimocuarta parada del Gran Circo celebrada en el trazado urbano de 23 curvas que recorre la zona de Marina Bay, al que Lewis Hamilton llega por primera vez del año como líder, Toto Wolff opina que Singapur es “un gran escaparate para la Fórmula 1”, señalando como única la condición de carrera nocturna. Con respecto a las altas temperaturas y la humedad extrema, explica que “hasta estar en el box es complicado” y que la mayor complicación para sus pilotos es la de gestionar neumáticos y frenos y las temperaturas de estos. “Hay muchas estrategias porque casi seguro habrá coches de seguridad”, comparte Wolff, en su afán de “sacar el máximo posible para conseguir un resultado fuerte”.
Autor del artículo: Alberto Pacios/@albertomclatas
Fotos: Mercedes AMG F1
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