Red Bull Racing ha confirmado que un daño importante en el fondo plano del Red Bull RB15 fue la causante de que Max Verstappen no pudiera pelear por la victoria en el pasado Gran Premio de los Estados Unidos. 

En Estados Unidos, Verstappen y Red Bull fueron los únicos que pudieron plantarle batalla al equipo Mercedes durante la carrera del pasado domingo en el circuito de las Américas.

No sería hasta las últimas vueltas de la competencia cuando Verstappen aprovecharía la batalla entre Bottas y Hamilton para acercarse a los compañeros que peleaban por el liderato de la carrera y tener así la posibilidad de reclamar su octava victoria en la F1.

Pero al final, Verstappen se quedaría cerca de pasar a Hamilton cuando sufrió por las banderas amarillas en la curva 12, finalizando en tercera posición a menos de un segundo del británico de Mercedes que cruzó la línea de meta en segundo lugar.

Sin embargo, después de la carrera el equipo austriaco encontró un daño importante en el fondo plano del Red Bull RB15 del piloto holandés, siendo la principal causante de que Verstappen tuviera desequilibrio durante la carrera.

Christian Horner, director de Red Bull Racing:

“Tuvimos un fin de semana bastante decente, en clasificación estuvimos a milésimas de la pole, pero perdimos un gran trozo de fondo plano bastante pronto en carrera”, dijo Horner a Motorsport.

Horner admitió que en la salida Verstappen daño el endplate de su alerón delantero, pero que los daños más significativos por el fondo plano aparecieron en la quinta vuelta cuando notaron que perdían carga aerodinámica.

“Dañamos el endplate del alerón delantero con un toque en la primera curva, y luego tuvimos daños en el fondo plano que no sé si fueron resultado de eso o de irse largo en la primera curva. Pero desde la vuelta 5 vimos caer la carga aerodinámica y un gran agujero en el fondo plano“, admitió.

A pesar de que Verstappen mostró un mejor ritmo en las últimas vueltas, Horner reconoció que el daño no provocó que el holandés perdiera ritmo, sino que provocó el desequilibrio del monoplaza y la degradación de los neumáticos.

“Es complicado cuantificar el rendimiento, pero, sin duda, nos hizo degradar más porque el equilibrio cambió notablemente. Max se estuvo acercando a Lewis al final de la carrera, porque este se estaba quedando sin gomas. Pero la combinación de doblados y banderas amarillas condicionó el final”, finalizó Horner.

Por su parte, Max Verstappen comentó después de la carrera:

“Estuve sufriendo con un extraño sobreviraje. Inicialmente, me dijeron que era el alerón delantero, que tenía algo de daños, pero después de la carrera vi el coche y faltaba un gran trozo del suelo delante de la rueda trasera. Eso me costó mucho tiempo”.

“No sé cuándo pasó, pero muy pronto durante la carrera tuve este comportamiento extraño del coche, el cual no había sentido antes. Fue mala suerte, porque creo que podríamos haber acabado mejor de no ser por esto“, dijo Verstappen.

 

Autor del artículo: Diego Cortés (@DiegoCorts17_)

Imagen: Red Bull Racing (@redbullracing)