La máxima autoridad de la F1 se centró en la FIA después de las polémicas en las que se ha visto involucrada la federación estas últimas semanas.

Aunque la temporada 2023 ya ha concluido, la Fórmula 1 no descansa, al igual que los problemas. Estas últimas semanas ha tenido lugar la polémica sobre el caso Wolff, surgida por un comunicado que emitió la FIA a principios del mes de diciembre. En dicho escrito, la federación confirmaba el inicio de una investigación sobre un posible intercambio de información confidencial entre un director de equipo de F1 y un miembro de la dirección de esta. El comunicado se refiere a Toto Wolff (director del equipo Mercedes) y Susie Wolff (directora de la F1 Academy).

Los protagonistas reconocieron su decepción ante este hecho y, menos de dos días después, el órgano rector afirmó que la investigación había concluido de forma positiva, es decir, que el matrimonio Wolff no ha intercambiado ninguna información confidencial.

Sin embargo, no es la única polémica en la que se ha visto envuelta la FIA. Mohammed Ben Sulayem – presidente de la FIA – ha tenido problemas con Jean Todt y los actuales dirigentes de la máxima categoría del automovilismo.

La relación entre la F1 y la FIA se aleja mucho de ser buena y sólida. Estos dos últimos hechos solo son una gota más de agua en un vaso que parece ya estar lleno.

Stefano Domenicali – dirigente de la F1 – aseguró que la FIA debe hacer un examen de conciencia para mejorar la credibilidad de este deporte internacional. El director italiano indicó que debería haber una diversificación de competencias en las funciones: por una parte, los que tienen los derechos comerciales de la F1; por otra, quienes pertenecen a su órgano de gobierno. Y todo esto, sin echarse encima de la federación.

“Creo que cuanto más crece la Fórmula 1, la diferenciación entre la FIA y la F1 es cada vez menos relevante. Tenemos que hablar de una plataforma deportiva que necesita una diversificación de competencias que tienen que estar claras, por lo que cada uno tiene que hacer un examen de conciencia para hacer mejor su trabajo”, afirmó Domenicali.

“Está claro que en este momento necesitamos una federación que haga examen de conciencia de manera correcta. Tenemos la suerte de hacer este trabajo porque hay federaciones extraordinarias en todo el mundo. No podríamos prescindir de los comisarios y todos aquellos que trabajan con mucha pasión en cada fin de semana de carreras. Sin su contribución vital, no podríamos hacer nuestro trabajo”.

“Pero está claro que no se deben tener ciertas actitudes. Ese es un tema sobre el que tendremos que hablar, de forma constructiva como es nuestro y mi estilo, de cara al futuro, porque aquí nos jugamos la credibilidad de algo que cada vez es más grande”, sentenció el director general de la Fórmula 1.

 

Autor del artículo: Patricia Ledesma

Imagen: F1