Russell da la sorpresa y se lleva el primer puesto en los Libres 2 del GP de Miami

Segunda prueba de fuego en este Gran Premio de Miami, donde todos los pilotos han seguido probando los límites de esta enrevesada pista, haciendo mayormente tandas con los neumáticos medios para terminar con los blandos. En una accidentada sesión de dos banderas rojas, Russell ha confirmado que las mejoras de Mercedes están surtiendo efecto para escalar varias posiciones en la clasificación.

Aunque Red Bull y Ferrari están guardando varias cartas para la hora de la verdad, el W13 parece haber dado un salto de calidad tras el voluminoso paquete de mejoras que ha traído la escudería alemana en Miami, especialmente para intentar salvar lo que queda de temporada. El británico, de hecho, ha dado la sorpresa llevándose el primer puesto en estos Libres 2, acompañado por Charles Leclerc y Sergio Pérez.

No es fácil tener una referencia clara de donde está cada equipo, porque los pilotos están en continua adaptación de la pista y el propio trazado sigue siendo una pista de hielo, con muy poca adherencia y bastante resbaladiza. Otro aspecto fundamental va a ser el graining, porque se esperan altas temperaturas para el sábado y el domingo.

Carlos Sainz y Max Verstappen, fuera antes de tiempo

En cuanto a los españoles, solo Alonso ha conseguido dar esperanza con su quinta posición. Otra cosa será el ritmo de carrera con más carga de gasolina, pero el Alpine parece ir rápido a una vuelta. Carlos Sainz sigue con el mal fario que comenzó en Australia y que siguió en Imola, porque en estos Libres 2 perdió el control del coche para estamparse contra el muro. Suspensión rota y vuelta al garaje con un nuevo error en la cuenta particular del español.

Los problemas también se han presentado en Red Bull, porque Verstappen ha tenido que abandonar la sesión a falta de media hora para el final. Tras un aviso del holandés por la radio donde se quejaba de un problema con el volante, el coche volvió a echar humo en uno de los frenos traseros, tal como le pasó a Checo Pérez en Melbourne. Y en cuanto al volante, todo ha quedado en un fallo hidráulico del monoplaza.

También se quiso apuntar a la fiesta Latifi, aunque todo fue culpa del motor de su Williams. A falta de 10 minutos, el monoplaza se paró en seco, lo que obligó a sacar la segunda bandera roja -tras el accidente de Sainz- para retirar el coche de la pista. Tras la reanudación, tan solo ha dado tiempo para dar unas vueltas más y ganar un poco de confianza.

Sigue siendo toda una incógnita el devenir de este Gran Premio, que está recordando mucho al ritmo de Arabia Saudí. Muchos parones, banderas rojas, trompos, errores y fallos mecánicos. La toma de contacto con este nuevo trazado sigue siendo escasa para los pilotos, y ya falta menos para el momento donde hay que ir rápido de verdad. Más dudas que certezas en Miami, pero todavía queda una sesión de prueba más para darlo todo antes de la clasificación.