La temporada 2020 se vuelve a presentar como una reiteración del duelo tripartito entre Ferrari, Red Bull y el omnipresente Mercedes. Este último parece que con su dupla de pilotos, equipo técnico y germánica organización no presentan casi problemas en pista.
Hace calor
Sin embargo, si han tenido problemas. Algunos de ellos les resultaron insolubles. Entre ellos se vieron en el equipo de refrigeración. ¿La razón? Un radiador limitado para su grupo impulsor. El punto culmine de estos problemas se vieron en el GP de Austria, en donde Valtteri apenas alcanzó el tercer escalón del podio a 18 segundos de Max Verstappen, a la postre ganador de esa competencia.
Sistema de refrigeración
Por esa razón, el equipo de Stuttgart se enfocó en lograr una sustancial mejora en el sistema de refrigeración. Esto le permitirá al motor trabajar con temperaturas superiores y evitar que vuelva a convertir en un problema. Consultado sobre este pequeño “Talón de Aquiles” de las Flechas de Plata, su director técnico, James Allison explicó:
“Hemos mejorado el paquete de refrigeración. Hemos creado más superficie frontal –por lo que hay más área de radiador real”
Now it’s time
Preguntada la razón por la cual no se había realizado esta mejora con anterioridad, ya que se había descubierto este problema, Allison agregó:
“… es una cosa difícil de hacer a mitad de temporada sin incurrir en una gran penalización. Pero entre un año y otro puedes hacerlo y no te costará más que un poco de peso“.
Regla de tres inversa
Estas mejoras, que tal vez parezcan menores y no están a la vista de los espectadores – por lo que muchas veces pasan desapercibidas – fue parte de la contribución al programa de Mercedes de F1 del HPP (por sus siglas en inglés High Performance Powertrains). Este departamento se enfocó en elevar la temperatura optima de funcionamiento del motor. Esto produce un alivio a la parte de refrigeración ya que, al trabajar a temperaturas más altas, el tamaño del radiador puede reducirse.
La palabra de Andy Cowell
Andy Cowell, el jefe de motores de HPP agregó a las palabras de Allison que este tema no solo había sido descubierto, sino que la solución se empezó a trabajar en la temporada 2019. Estas son sus declaraciones:
“A principios del año pasado, la capacidad de refrigeración de nuestro monoplaza era insuficiente, lo que dio lugar a algunas carreras complicadas. En las dos primeras carreras, cuando se hizo evidente que no teníamos suficiente capacidad de refrigeración, empezamos a trabajar en probar la unidad de potencia en rangos de temperatura más altos”.
Austria, punto de inflexión
En su explicación a los medios, Cowell hace referencia al ya citado GP de Austria indicando que:
“En Austria logramos probar cuatro grados más en la temperatura del agua, lo que ayudó a hacer la carrera de Spielberg un poco más llevadera, pero aún así fue un fin de semana muy duro para el equipo”.
La presente temporada
Cuando se le consultó sobre la temporada que comenzará a mediados de marzo en Australia, el jefe de motores se sinceró indicando que:
“Para este año estamos haciendo un esfuerzo significativo para asegurarnos de que todos los fluidos de refrigeración de la unidad de potencia funcionen a una temperatura más alta. Esto aumenta la diferencia de temperatura entre ese fluido refrigerante y la temperatura ambiente a la que estamos compitiendo, lo que aumenta la eficacia del sistema de refrigeración”.
Un desafío dificil
Andy Cowell culminó su exposición sobre el tema de la refrigeración y de los motores presentando la prueba más grande con el cual deberán lidiar:
“Es un desafío difícil, porque grandes partes del motor están hechas de aluminio y las temperaturas a las que operan significa que las propiedades del material decaen bastante rápido. El gestionar eso con un ciclo de ocho carreras por unidad de potencia es un duro desafío de ingeniería, pero eso es lo que estamos tratando de hacer.”
Imágenes: Mercedes-amg-hpp y Mercedesamgf1
Leave A Comment