El triunfo del piloto australiano Oscar Piastri en el Gran Premio de Hungría este fin de semana ha convertido esta temporada en una de las más competitivas de los últimos diez años. No veíamos siete ganadores distintos en un año desde el año 2012 y, sin duda, esto añade emoción a la carrera por el título de la F1. No es que el dominio aplastante del neerlandés Max Verstappen esté en peligro, pero la competencia se está endureciendo.
Aunque Verstappen comenzó el año 2024 con una serie de victorias notables, siendo imbatible en las cinco primeras carreras, la competencia ha venido cobrando fuerza semana tras semana. El primer en frenar la racha del neerlandés fue Carlos Sainz (Ferrari), quien supo aprovechar un fallo en los frenos del monoplaza de su contrincante y se llevó la victoria.
Desde entonces, hemos visto sobresalir a pilotos como el británico Lando Norris (Miami), Charles Leclerc (Ferrari), George Russell (Mercedes) y, más recientemente, a Piastri (McLaren). A este último, se debe la última victoria, obtenida en el Gran Premio de Hungría, que le ha valido para entrar en la historia de la F1 como el quinto piloto australiano en obtener un triunfo.
Esto reafirma la sensación de que el equilibrio y la sana competencia han vuelto a la F1. Aunque Verstappen sigue liderando la clasificación de Pilotos, la diferencia con sus seguidores se está reduciendo. No es nada comparado con la temporada pasada, en la que terminó con el doble de puntos que su compañero de equipo.
No se daba una temporada con al menos siete ganadores diferentes desde 2012, cuando Sebastian Vettel (Red Bull) logró su tercer Mundial, en una parrilla con seis campeones del mundo. Aquel año, Jenson Button (McLaren), Fernando Alonso (Ferrari), Nico Rosberg (Mercedes), Mark Webber (Red Bull), Pastor Maldonado (Williams), Lewis Hamilton (McLaren) y Kimi Raikkonen se subieron a lo más alto del podio.
Para concluir, en aquel 2012, Vettel acabó la temporada con cinco victorias, seguido de Lewis Hamilton con cuatro, Button y Alonso con 3, Webber con 2, y Rosberg, Maldonado y Raikkonen con una cada uno. El campeonato se decidió a favor del alemán por tan solo tres puntos, siendo Alonso, con 13 podios, su más cercano perseguidor.
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