Homenaje a Fernando Alonso: 300 cual espartano

Llega el GP de Canadá, una de las citas emblemáticas del calendario, tanto por su cercanía con sus ya míticos muros, como por la leyenda que da nombre a este certamen, Gilles Villeneuve. Pero, hay un hito y un mito que van a volver a hacerse uno en este GP, y no será otro que nuestro bicampeón, Fernando Alonso, que llegará a los 300 GP’s en F1, una absoluta barbaridad.

En Graining, como humilde homenaje a la figura de nuestro supercampeón, hemos querido hacer un repaso por los que han sido sus mejores momentos en F1, así como los que nos han emocionado en lo personal, y en lo deportivo. Aquí va nuestro pequeño homenaje Fernando, con el deseo de celebrar contigo, al menos, 100 GP’s más:

2001-EL INICIO: UN MINARDI REBELDE MANEJADO POR UN JOVEN FEROZ

Como todo campeón, Alonso tiene su historia, sus inicios, esos momentos decisivos en los que puedes pasar de iniciar tu camino a la gloria a descender a los infiernos del olvido. Fue un 2001 de muchos abandonos, ningún punto, pero sí el inicio de una tenue luz que ya vislumbraba lo que vimos poco después: un joven y valiente campeón. Su mejor posición: un 10º puesto en el GP de Alemania

2003- LA TENUE LUZ COGE FUERZA: ALONSO VENCE POR PRIMERA VEZ

Tras un año sin competir ocupando el puesto de piloto probador en Renault (en el que disputó una barbaridad de kilometraje como probador), la oportunidad de Alonso como piloto oficial llegaría, de la mano de su amigo y mentor, Flavio Briatore, coche con el cual haría una prodigiosa ‘pole’ en Malasia, lugar donde haría podio, también podio en Brasil, y el culmen, en Hungría con una espectacular victoria que le situaba como el piloto más joven de la historia en ganar un GP.

2004- TRANSICIÓN ENTRE SOMBRAS ANTES DE LA GLORIA

El año 2004 fue un año extraño, con un coche veloz, pero sin las prestaciones suficientes para alcanzar a los más rápidos. La victoria de Trulli en Mónaco fue lo más destacado de los de Enstone, con un Alonso que consiguió 4 podios, pero se quedó algo lejos del objetivo que él esperaba, aunque, lo mejor estaba por llegar.

2005- LA LUZ MÁS INTENSA: LA GLORIA

Su cuarto año en F1 sería una recopilación de éxitos, victorias, y demostraciones constantes del campeón español que estaba asombrando al mundo. El mejor momento de la temporada, a parte del momento en el que Alonso gana el mundial, es sin duda su lucha con el gran Kaiser en Imola, circuito en el que fue capaz de aguantarlo durante 15 vueltas, aunque su R25 constaba de unas prestaciones inferiores. Ese día se forjó una leyenda, en un año que acabaría con el campeón más joven de la historia, y el primer español en conseguirlo.

2006- ADIÓS A RENAULT CON TÍTULO INCLUIDO

Tras los 7 triunfos conseguidos en 2005, el R26 se presentaba como una máquina dispuesta a todo, aunque no tan superior como el Ferrari, aun así, otro soberbio año de Alonso, con victoria en España incluida (tejida por completo de azul), completaron un ciclo en Renault que sin duda se podía denominar de ‘sobradamente exitoso’. Otras 7 victorias acompañaron al asturiano en su adiós a los galos.

2007- HAMILTON, WOKING EN CONTRA Y MUCHO RON

La llegada a Alonso a las filas de Woking causó una gran expectación mediática, porque juntaba al actual bicampeón del mundo con la joven promesa británica Lewis Hamilton, protegido de Ron Dennis y joven llamado a ser el siguiente campeón del mundo. Un año de división interna, donde las ‘malas voces’ apuntaban a un favoritismo a favor de Hamilton por parte de la escudería británica. 4 victorias y el mundial perdido en la última cita, Alonso abandona Mclaren.

2008- LA DURA VUELTA A CASA

Tras un año en Mclaren, con un equipo dividido que les hizo perder el campeonato, Alonso vuelve a Renault, su casa, para disputar una temporada con un coche que no era ganador, pero que fue de menos a más y le permitió ganar Singapur y Fuji.

2009- LA SEGUNDA DESPEDIDA DE RENAULT, SIN BRILLO

Con la entrada de la nueva normativa, y el dominio aplastante Brawn GP y su doble difusor, Renault y Alonso pasaron un año sin brillo mezclados con la segunda línea de combate. Un podio en Singapur, el único hito de un año de transición.

2010- LA GLORIA CON ‘IL CAVALLINO’, A UN PETROV DE DISTANCIA

Tras dos años sin pena ni gloria en Renault, Alonso fichaba por la todopoderosa Ferrari, la cual había construido un proyecto ganador para conquistar un campeonato del cual se quedaron lejos en 2009, y que perdieron en la última curva en 2008. En su primera carrera, Alonso vencía en Barhein y volvía a sonreir, el campeón estaba de vuelta. Tras una parte del año líder, Alonso perdía el campeonato en Abu Dhabi, la última cita, tras un clamoroso error estratégico imperdonable por parte de Ferrari.

2011- CON UN RED BULL GALÁCTICO, EL SAMURAI SIGUIÓ SU LUCHA

Vettel, que se coronaba campeón del mundo por primera vez en 2010, y rompía la marca de juventud que ostentaba Fernando, disponía en 2011 de un vehículo letal que no concedió ni un milímetro de ventaja a sus rivales. Una victoria en Silverstone y el podio en Monza, las únicas luces de un año a la cola de los austríacos.

2012- VALENCIA: ‘’THIS IS THE MOST BEAUTIFUL’’

Tras un 2011 a la sombra de Red Bull, el Ferrari 2012 era un vehículo veloz con opciones a todo, aunque un escalón por debajo de Red Bull. Las victorias en Malasia, Alemania, y sobre todo, en Valencia, hicieron de un año soberbio de Alonso otra bala pérdida para vencer el mundial. Los accidentes de Bélgica y Japón dejaban a Fernando sin su tercer título mundial.

2013- ÚLTIMO SUBCAMPEONATO Y LEVE INICIO DEL DECLIVE

El que sería el último año de la era V8 y por ende, del aplastante dominio de Red Bull y Vettel, dejaban a Alonso con dos victorias, una en China y la otra en España, con sus dos últimas victorias hasta la fecha en F1. Un subcampeonato y muchos podios, lo más destacado de otro año a la sombra de los de Milton Keynes.

2014- DESASTROSO FIN DE LA ‘ERA FERRARI’

La llegada de los V6 no sentaron nada bien en Maranello, que lejos de poder ofrecerle un coche competitivo a Fernando, le dieron un coche acomodado para la segunda línea de la competición, algo que, sumado a los ‘malos rollos’ internos de los italianos, hicieron al asturiano tomar la decisión de no renovar y de abandonar Ferrari rumbo a Woking, de nuevo. Lo más destacado, un 2º puesto en Hungría.

2015- UN BINOMIO QUE SUPO A TRAGEDIA

Mclaren Honda, uno de los binomios más exitosos de la historia de la F1, firmaban reencontrarse en la era V6 para buscar reeditar los años de triunfo de la época Senna-Prost, firmando a Fernando Alonso como estandarte del proyecto, acompañado del campeón de 2009, Jenson Button. La realidad entre tanta expectación: 7 abandonos y un 5º puesto en Hungría.

2016- LEVE ASCENSO DE HONDA, PERO MUY INSUFICIENTE

Tras un desastroso 2015, Mclaren y Honda buscaron rediseñar sus conceptos encontrando un coche algo más estable, con solo 4 abandonos para el asturiano y un gran 5º puesto en Mónaco, gracias a una gestión heroica del compuesto ultrablando.

2017- GRAVE RECAIDA Y FIN DEL JUEGO EN F1, BRILLANTEZ EN AMERICA

Con un 2016 algo menos trágico a sus espaldas, aunque muy insuficiente para marcas ganadoras como Mclaren y Honda, los japoneses rediseñaron de nuevo el concepto de su unidad de potencia, generando un año de desastres, rupturas y calamidades dentro de Woking, quienes tampoco hicieron un brillante trabajo, algo que dejó a Alonso con 8 abandonos y solo un 6º en Hungría. Lo mejor del año, sin duda, la participación en las Indy 500, que, si no es por la ruptura de su motor Honda, podría haber dejado la victoria de Alonso en dicha competición, segundo escalafón para conquistar la ‘Triple Corona’.

2018- Mclaren Renault y Toyota: Luz y sombra

En Australia vimos una 5ª posición y un ‘We can fight’ que nos caló por dentro como rayo de luz y esperanza en volver a ver a Alonso en los puestos de arriba, algo que no se ha podido concretar en F1, pero sí en el WEC, donde Alonso venció las 6h de Spa junto a sus compañeros del dorsal 8 de los japoneses. El mejor Alonso, el más experimentado y completo que cumple 300 GP’s entre un mar dudas sobre su futuro y inmediato, aunque eso sí, impartiendo catedra en pista, demostrando que debe ser recordado como uno de los mejores de la historia.