La escudería americana no ha encontrado la tecla para hacer funcionar a su monoplaza en un trazado que se les atraganta. Ambos coches se han quedado fuera en el primer corte y esperan una carrera dura, luchando contra ellos mismos.
Haas no puede ir a peor este fin de semana en México. En la clasificación disputada en el Autódromo de los Hermanos Rodríguez, ambos monoplazas estadounidenses han quedado eliminados en Q1 incluso por detrás de los Sauber, la cenicienta de la actual parrilla. La única buena noticia es que adelantan posiciones ya que McLaren arrastra sanción.
Romain Grosjean está viviendo un auténtico calvario durante el Gran Premio de México. El piloto francés ha terminado último la sesión de clasificación, en decimonovena posición ya que Gasly ni siquiera ha podido salir a rodar. Grosjean admite que van a sufrir de lo lindo en carrera.
“Hemos tenido un fin de semana duro. No rodamos nada ayer, asó que por supuesto siempre hay rendimiento ahí. Tuve una vuelta muy pobre en la vuelta de preparación al final con mucho tráfico, así que había algunas décimas en el bolsillo, pero nada que nos hubiera puesto donde deberíamos estar. No hay excusas. Tenemos un motor Ferrari de 2017 que es más potente que el de Sauber. Necesitamos trabajar, y necesitamos encontrar una manera de hacer el coche más rápido en los circuitos donde necesitamos carga aerodinámica extra.
“Van a ser 71 vueltas con un puñado de coches para pilotar mañana. Cualquier cosa es posible. No quiero ser súper positivo diciendo que todo va a ser genial, pero nunca sabes en la carrera. Es un circuito duro y la refrigeración es un problema para todos. Los frenos van a sufrir. En Singapur se suponía que no sumaríamos y lo hicimos. Siempre hay esperanza, pero definitivamente va a ser una carrera dura“, finalizó el francés.
Justo delante de Grosjean sale Kevin Magnussen , su compañero de equipo. El danés afirma que temían acabar algún día en la cola de clasificación tras los problemas sufrido en anteriores GP’s. Además, creen que el trazado mexicano es un circuito donde se exponen todos sus problemas.
“Temíamos que este fin de semana sería difícil. Obviamente no fuimos muy rápidos en clasificación. Esta pista es como nuestro talón de Aquiles. Es algo esperado, pero aún así es decepcionante. Simplemente tenemos que empujar. Los problemas son una combinación de cosas. Diría que con la densidad de aire de aquí, todos tienen que refrigerar sus coches mucho más, refrigerar el motor, el agua, todo. Cuando hacemos esto, no tenemos un enfriamiento muy bueno. Perdemos mucho ahí, y parece muy malo esta vez. Espero que podamos estar en la pelea mañana y al menos empujar y ver dónde podemos llegar. Espero que nuestro ritmo de carrera sea mejor que nuestro ritmo de clasificación”, finalizó.
Imágenes: @HaasF1Team
Autor: Oriol Muñoz/@orimotor
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