En la noche de Marina Bay acogerá una de las carreras más movidas del calendario; dentro y fuera de la pista.
El Gran Premio de Singapur celebra su décimo aniversario acogiendo a la Fórmula 1, qué mejor escenario para vivir uno de los fines de semana más determinantes de la temporada. Determinante porque McLaren y Honda anunciarán su separación tras tres años de desastrosa relación en el trazado urbano. Del mismo modo, la formación británica informará de la unión con su nuevo socio: Renault. Además, también podríamos conocer detalles sobre el futuro de Carlos Sainz, por lo que el paddock será un auténtico hervidero durante todo el fin de semana.
De todos modos, no olvidemos lo más importante: la cascada de anuncios y noticas embalsamarán una nueva prueba del calendario en la que Ferrari quiere volver a plantar cara a Mercedes tras un GP de Italia descafeinado por parte del equipo de Maranello y en el que los de Brackley obtuvieron un sólido doblete en casa del enemigo. En lo que llevamos de año, la escudería italiana se adaptado bien a circuitos con características similares a Marina Bay; es decir, carga aerodinámica y curva de baja y media velocidad.
Sebastian Vettel buscará romper la racha de victorias de Lewis Hamilton, quien ha ganado todo tras las vacaciones de verano. El británico arrebató, en Monza, el liderato al alemán, aunque la distancia de tres puntos continúa siendo ínfima.
Singapur tiene el privilegio de contar con una de las carreras más singulares del calendario. Además de ser la única prueba urbana y nocturna, Marina Bay es el trazado con más curvas del Mundial; un total de 23 a lo largo de sus 5.065 km. Además, es la prueba más larga del año, donde se suele rozar el límite de las dos horas. Sumado a la humedad y el calor de la pista, supone un enorme desgaste físico para todos los pilotos.
El trazado, al que los pilotos deberán dar 61 vueltas, cuenta con dos zonas de DRS. Una localizada en el primer sector, con la zona de detección en la curva 4 y, la segunda, en la propia recta de meta, con la zona de detección en la pequeña recta que le precede. Para esta cita, Pirelli ha decidido llevar los neumáticos blandos (amarillo), superblando (rojo) y ultrablando (violeta).
El récord de la vuelta lo logró el pasado año Daniel Ricciardo con un tiempo de 1:47.187, aunque es previsible que con las características de los monoplazas de 2017, ese registro se quede anticuado.
Nico Rosberg fue el vencedor y ‘poleman’ del pasado año, con Daniel Ricciardo y Lewis Hamilton completando el podio. De hecho, Red Bull podría afrontar en Marina Bay una de sus últimas y grandes oportunidades para conseguir un buen resultado, por lo que habrá que mantener un ojo puesto sobre la evolución del RB13 en el trazado nocturno.
Como aliciente para un fin de semana que se antoja espectacular, la meteorología también jugará un importante papel en Marina Bay. Además del calor, superando los 30ºC, la lluvia también estará presente durante los tres días de evento, por lo que podría afectar a cualquiera de las sesiones que se disputen.
Uno de las mejores características del GP de Singapur son sus horarios. Pese a disputarse en Asia, al tratarse de una prueba que se celebra por la noche, las horas de disputa de cada una de las sesiones no varían demasiado respecto al Viejo Continente, por lo que gozamos de cierta comodidad: el viernes se disputarán los Libres 1 y 2 a las 10:30:h y 14:30h respectivamente; el sábado los Libres 3 y la Clasificación a las 12:00h y 15:00h; y el domingo la carrera, el plato fuerte, a las 14:00h.
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