Desde el momento en que los semáforos volvieron a apagarse, y Sebastian Vettel vio como su compañero le cerraba el interior de la curva, todo se dirijo hacia el derrumbe de la moral de los italianos que colmaron el ‘Autodromo Nazionale di Monza’.

En la llegada a la segunda chicán, Lewis Hamilton derrotó con decisión a un dubitativo Vettel, que se equivocó arrinconando al británico y se vio girado en dirección contraria, tras contactar con Lewis y trompear.

Con un coche dañado, Seb logró remontar hasta la cuarta posición, pero rompiendo la ilusión de unos tifosi que ansiaban la tan necesitada victoria del hombre de Ferrari, que ahora se ve relegado 30 puntos tras el líder en la Clasificación:

Sebastian Vettel (4º):

“Intenté adelantar en la salida a Räikkönen en las curvas 1 y 4, pero no pude. Alargó las frenadas, en todo su derecho, así que tuve que hacerme a un lado y dejarle un hueco a Lewis. Entonces me toqué con Lewis y tuve la mala fortuna de trompear, dañando el coche”, relataba el alemán.

“Nuestra carrera se vio comprometida desde ese punto, y es una pena. Sólo me quedaba hacerlo lo mejor posible y remontar. Realmente, podría haber sido peor. Es decepcionante obviamente, porque teníamos el ritmo para ganar”.

“Aún quedan muchos puntos por repartir, pero necesitamos seguir mejorando, tenemos margen para ello. Lo siento por nuestros tifosi, se merecían un resultado mejor hoy”, se lamentaba Vettel.

Su compañero, Kimi Räikkönen, fue víctima de la estrategia de Mercedes, que le obligó a sacar todo el rendimiento de sus nuevas gomas para que el ‘overcut’ de Hamilton no lo relegara a la segunda posición. Para su frustración, los esfuerzos fueron demasiados, y gastó sus neumáticos antes de alcanzar a un Bottas, aún sin parar, que lo frenó hasta que el británico los alcanzara.

Finalmente, el ‘iceman’ fue adelantado pero logró ser el único representante de los ferraristas en el Gran Premio de Italia:

Kimi Räikkönen (2º):

“El coche iba muy bien hoy. Nuestro primer juego de neumáticos fue bien, pero el segundo no duró tanto como esperábamos. No había mucho que hacer, tuvimos que apretar en todo momento, sin un minuto para poder gestionar un poco las gomas”, declaraba el finlandés.

“Está claro que queríamos un resultado mejor. Es fácil decir lo que debimos hacer en un mundo ideal, pero hicimos lo que pensamos que era correcto, y no creo que estuviese mal. Creo que hemos tenido suerte de poder llegar a meta, no quedaba mucha goma en la trasera izquierda”.

“Va a estar muy apretado en las próximas carreras. Lo daremos todo”, sentenciaba Kimi.

Imágenes: Scuderia Ferrari