Artículos de Opinión

Un artículo hecho a la medida del lector argentino, disculpas por anticipadas a nuestros amigos del extranjero.

Cavallino y Boca Juniors

Con la reciente y casi inesperada noticia del reemplazo de Maurizio Arrivabene por Mattia Binotto su gran antagonista en Ferrari, el mundo de la Fórmula Uno, perdón es decir el Imperio de Maranello se encuentra escribiendo una historia muy parecida a la que un equipo de fútbol viene llenando las hojas de los periódicos deportivos argentinos. Tanto el Cavallino como Boca Juniors, el equipo de fútbol al que me refiero, tienen profundas raíces italianas, y si son exultantes en la victoria, las derrotas son más que dolorosas. Casi siempre se apunta a un Chivo Expiatorio, para continuar con un Gatopardismo que solo se les permite al disponer de excelentes bancas económicas.

Primer paso, los resultados

El primer paso en esta comparación es plenamente resultadista. Boca Juniors había contratado un director técnico formado en su propia casa. Este no logró los resultados esperados (me refiero a Arruabarrena, sin chistes de su barrenador, please) y fue reemplazado por otro hombre de la misma cantera, tan exitoso como el primero, pero más afín a los hinchas, hablo de Guillermo Barros Schelotto. Su posición como entrenador duro dos años, desde el 2016 hasta diciembre de 2018, muchos miles de dólares con un doble objetivo, ser campeón internacional y derrotar a su eterno rival: River Plate. A pesar de un bicampeonato local, los otros objetivos no se lograron y antes la más amarga de las derrotas, ¿dio? un paso al costado, siendo reemplazado por un tercer nombre.

De Stefano a Mattia

Del otro lado el Atlántico, en Italia, Ferrari había contratado a Stefano Domenicalli como Team Principal, su suerte se encontraba atada a la imagen de Fernando Alonso. Sin embargo las continuas derrotas por los campeonatos sumadas a ciertos chasis mediocres hicieron que Ferrari fiche nuevamente por Kimi Raikkonen, casi una invitación para que el español migre a McLaren dejando su lugar a Sebastian Vettel. Sin el ancho de espadas, Stefano encontró las horas contadas en Maranello. El alemán se convertía en el nuevo favorito, los tifosis creían volver a ver a un Michael Schumacher. El Imperio del Cesar parecía volver a épocas gloriosas. Junto con Sebastian, apareció el nombre de Maurizio Arribavene, triado por el nuevo chairman de la empresa, Sergio Marchionne. Cuatro años más tarde, con la inesperada muerte de Sergio, Maurizio se vio en la misma situación de Stefano. Los millones de Euros no sirvieron para volver a ser campeones, y el cartel sobre la puerta de su escritorio ya puede leerse Mattia Binotto.

Relación

Segundo paso, la psicologia

El segundo es enteramente psicológico. Es increíble como la mente juega sobre la performance de las personas. En el caso de Boca Juniors, su ex técnico Barros Schelotto era capaz de ganar títulos locales, no obstante se le dificultaba jugar contra los denominados “equipos grandes” pero cuando la camiseta de River y la figura de su técnico Gallardo salían al campo de juego, la derrota del club de la Rivera (Boca Jrs) parecía el resultado fijo. Gallardo lograba nublar las ideas de Barros Schelotto al punto de derrotarlo, a veces casi sin jugar.

Vettel y sus fantasmas

Algo similar ocurre en la F1 entre Sebastian Vettel y Lewis Hamilton. Son dos grandes pilotos, pero el inglés derrota al alemán y al equipo Ferrari desde la psiquis. Vettel puede batir a cualquier otro piloto*, pero cuando el plateado auto 44 aparece, el alemán, así como el equipo Ferrari, comenten errores de principiantes o de los pequeños teams.  Lewis se siente y se sabe ganador, y mientras esto no cambie, para la Ferrari Nº 5 serán campeonatos cuesta arriba; o ¿será la última oportunidad que el nuevo presidente de FIAT le dé al alemán? Hay aroma de lo ocurrido a fines del 2014 con Fernando Alonso. Muchos grandes pilotos darían lo que no tienen por ser pilotos de Ferrari en F1, con lo que no faltaran postulantes para ese auto. Seguramente Vettel tampoco tendrá problema de encontrar plaza si no le renuevan en Ferrari. El tiempo lo dirá.

Acotaciones al margen

NOTA: Recordemos que Vettel firmó para Ferrari por dos años (en 2017) después que Ferrari convenciese a Kimi Raikkonen de renovar por un año. Una vez que ambos pilotos habían puesto sus firmas en sendos contratos, Sebastian dio el OK para que Maurizio siga en su cargo en detrimento del entonces jefe técnico Mattia Binotto.

NOTA 2 *: En la publicación original de este artículo “https://marpla.com.ar/cuando-la-ferrari-se-copio-de-boca-juniors-o-fue-al-reves/ “ no se incluye en el desarrollo del mismo el factor psicológico que apareció entre Sebastian Vettel y Charles Leclerc

Imágenes: FIA y besthqwallpapers