- Sainz mostró su desacuerdo con no dejar que adelantara a Leclerc.
- No es la primera vez que ocurre pese a que el monegasco esté en una situación peor.
- La escudería busca soluciones a un conflicto que no termina de cerrarse.
Ferrari atraviesa una época que entremezcla lo adverso y lo turbulento. Sus pilotos tienen que adaptarse a un coche que es bastante inferior a los líderes y que es, de lejos, mucho peor que el monoplaza del año pasado.
Por si fuera poco, en el equipo hay diferentes estrategias que no terminar de contentar ni a unos ni a otros. Es el caso de Carlos Sainz Jr., quien pidió poder adelantar a Leclerc en pista al tener un mejor ritmo. Sin embargo, no se le permitió. El director de la escudería, Frédéric Vasseur, le respondió de una forma muy clara: “No, no, no. Hay que dejarse de bromas”.
Pese a lo tajante que fue su respuesta, Vasseur admitió estar contento con el quinto puesto de Sainz, en contraposición a Charles Leclerc, que se vio obligado a abandonar tras muchos problemas con el monoplaza.
A diferencia de la pasada temporada, Sainz domina ahora sobre Leclerc, tanto en pista como en clasificación. La única diferencia reseñable entre uno y otro es que Sainz no ha conseguido todavía subirse al podio esta temporada, cosa que sí ha logrado Charles Leclerc, con dos podios en Azerbaiyán y Bélgica.
Por el momento, Sainz es quinto en el Mundial de Pilotos con 102 puntos, tres por encima de Leclerc. Además, Sainz ha puntuado en todas las carreras salvo en dos, una de ellas abandonando. Leclerc, en cambio, ha abandonado tres veces en el presente año, quedándose además sin puntuar en una cuarta carrera.
Un precedente da la razón a Sainz
El año pasado, en el circuito de Silverstone, Ferrari ordenó a Sainz que no pasara a Leclerc en las vueltas finales. Sainz desobedeció la orden, al estar jugándose la victoria y tener el monegasco sus neumáticos muy degradados.
Finalmente, Sainz acabó ganando y Leclerc ni siquiera llegó al podio; las críticas a Ferrari fueron inmensas al haber estado Sainz a punto de quedarse sin victoria por una mala estrategia de equipo.
No obstante, y para alegría de todos, todo tuvo un final feliz: Sainz logró ganar, Leclerc no tuvo que soportar la presión de luchar por la victoria y aquello marcó un precedente que ha hecho mayor la competitividad entre los dos pilotos titulares de Ferrari.
Autor del artículo: Enrique Forján
Imagen: Scuderia Ferrari
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