Este es un análisis comparativo de la Fórmula 1 y la Fórmula E en lo referente a resultados. Desde ya aclaro que no voy a comparar a las categorías entre si, ya que ocupan dos universos que se unen en el común denominador del coche, pero sus propuestas y objetivos no son los mismos. Como ya dijese Alejandro Agag son el pináculo de dos pirámides diferentes, las cuales podrían unirse en un futuro. Pero eso es en un futuro, en este presente, y antes de comenzar la séptima temporada de la F- E y la septuagésima primera de la Fórmula 1, nos hemos detenido para realizar este breve trabajo de comparación numérica que abarca desde el 2014/15 de la Formula E y 2015 de la máxima categoría de monoplazas con motores a combustión (híbridos o no).

2014/15

Tomamos este bienio ya que, hasta la temporada 2019/20, la Formula E comenzaba su campeonato en las postrimerías del primer año y lo finalizaba al llegar el ecuador del año siguiente – verano europeo. En este período, la Formula E recién se instalaba en las calles, y ciertos limites no estaban fijos, como en el número de pilotos de recambio por equipo. Esto sumado al desconocimiento de los trazados callejeros dio por resultante un gran numero de ganadores diferentes. La Fórmula 1 corría su segundo año con la reglamentación hibrida y la flechas de plata mostraban ya su temible poderío. De ahí que los resultados dan siete ganadores diferentes para la novel serie contra solo tres de la Fórmula 1. Este número seria profético en lo reducido de nombres que visitaron el escalón más alto del podio.

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2015/16

Las aguas se van aquietando. Ya hay experiencia en la F-E, poca todavía, pero puntos referenciales en donde comenzar a ver que seguir y que mejorar. Este conocimiento, junto al fortalecimiento de los equipos mostraron una seria reducción en el numero de ganadores. Esta vez solo serían cuatro. La Fórmula 1 no le fue a la zaga, y mostró los mismos guarismos a las victorias. Si los porcentajes muestran mejores valores para la categoría eléctrica se debe a que ésta disputó la mitad de las carreras. En la Fórmula 1, la lucha encarnizada entre los hombres de Mercedes y la aparición de Verstappen dieron cierto condimento. Pero nadie puede, no osa subir al Olimpo del escalón más alto. Nadie quiere, ni puede, hacer despertar las iras de los Dioses de establishment.

2016/17

Por primera y hasta ahora única vez, la Fórmula 1 muestra un ganador más que la Fórmula E. Ya los equipos conocen los powertrain y los circuitos. Los pilotos a sus rivales y la forma de conducción de ‘adentro hacia afuera’, para buscar los límites.  En la Fórmula 1, la técnica, excepto en los callejeros como Mónaco es al revés, se va de dar mayor potencia, aún superando los límites de la pista para lograr esa ansiada sintonía fina que da la velocidad sin excesos. También la F-E muestra porcentajes menores en el campo de relación entre ganadores y participantes. Esta luz roja en la organización que quiere tener las basas equilibradas en pos del espectáculo tiene un remedio en la manga, la aparición de la segunda generación para la temporada 5. No obstante, y más allá del dominio de Buemi en victorias, un error de cálculos del suizo y una explosión de nervios le llevan a tirar un titulo ganado por la borda. La Formula 1 sigue mostrando que la autoridad en pista es una estrella y un piloto. Al dominio de Buemi, Lewis Hamilton le contesta con uno similar. Esto redunda que, para México, sea campeón. De las dieciocho carreras hasta el GP Azteca, Lewis se lleva el 50% .

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2017/18

Ultima temporada para el Gen 1 en la Formula-E. A partir del próximo campeonato el cambio de coches en mitad de la carrera pasará al museo. En esta oportunidad, hay repartición de porcentajes. Con el empate en el numero de ganadores, la Fórmula 1 se lleva el guarismo percentil entre participantes y ganadores. Esto se debe a que durante la temporada se alinearon solo veinte pilotos, contra los veinticinco nombres que presentó la Fórmula E. Esta última, con su limite en el número de carreras, le responde en el campo entre las carreras y el número de ganadores. La otra diferencia se ve en que en estas hasta ahora cuatro temporadas, la serie dirigida por Liberty Media solo mostró dos campeones sobre un solo auto; la Formula E repartió más los laureles y se refrendó con cuatro campeones en cuatro equipos diferentes y tres powertrains.

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2018/19

El análisis comparativo de la Fórmula 1 y la Fórmula E en lo referente a resultados continua. La Fórmula E muestra su evolución, el cual volverá a repartir las barajas. Esta herramienta abre la posibilidad de retar por la victoria a más equipos, y estos no dudan ni un segundo en realizar los asaltos. El número de ganadores casi se duplica, resultando la temporada, hasta ese momento, con mayor cantidad de ganadores. También se registraron trece competiciones para cubrir el campeonato. Jean Eric Vergne se convierte en el primer bicampeón de la serie que da la razón, en las estadísticas, a esta evolución. Con el campeonato consolidado, el Head to Head con la Formula 1 es mas real en números. Repite cinco nombres como ganadores, sin moverse nunca de los equipos Top.

2019/20

Nuestro análisis comparativo entre ambas series llega a la temporada de la pandemia. Esta sorprende a la Fórmula E con cinco carreras disputadas y a la Fórmula 1 llegando y volviéndose de Australia. La espera se prolonga por algunos meses y la vuelta toma dos caminos diferentes, pero dentro de burbujas. La primera aterriza en el Templehof para disputar seis carreras en nueve días, la segunda compite en algunos circuitos previstos y otros de reemplazo. Para diciembre ambas series habrán culminado sus respectivos campeonatos.

La Fórmula E vuelve a registrar nueve ganadores diferentes. Con varios cambios en los cockpits, el numero que presentó al final alcanzó un muy importante 32,1 %. Esta cifra supera claramente a la Fórmula 1. Aunque esta descubre a dos ganadores nuevos, la suma total es igual que en las últimas tres temporadas. Solo cinco hombres suben al escalón más alto. Esto registra solo un 21,7%. Cuando ubicamos la lupa en la relación ganadores y participantes, la Fórmula 1 registra una ligera mejora que lleva sus números casi al 30%. Esta es la mejor relación del período que estamos trabajando. No obstante, con un número mayor de ganadores y menos de competencias, la Fórmula E marca un histórico 81 por ciento.

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Conclusión del análisis comparativo de la Formula 1 y la Formula E

La conclusión del análisis comparativo de la Formula 1 y la Formula E nos muestra que tras seis temporadas completas, la serie dirigida hoy por Liberty Media solo produjo ocho ganadores, mientras que la serie eléctrica de monoplazas alcanzó los diecisiete. Si tomamos como punto de comparación las carreras disputadas, la categoría conducida por Jamie Reigle disputó sesenta y nueve carreras; su par hibrida, ciento diecinueve. Los porcentajes son más que claros, la Fórmula E araña los 25 % mientras la Formula 1 casi el 8%.

La tarea es clara, mientras la categoría reina de motores de combustión debe plantear una superación de estas cifras, la Fórmula E seguirá en su consolidación y espera de la aparición de su nuevo reto, el GEN 3.

 

Imágenes: Daimler Benz magazine – Mercedes Benz – FIA Formula E