Russell y Kubica acaban los dos últimos en la primera cita del mundial
Williams ha conseguido traer sus dos coches al garaje en el primer Gran Premio de la temporada, celebrado en Melbourne. Los de Grove no han tenido nada de ritmo en todo el fin de semana si lo comparamos con el resto de la parrilla y por eso han sido los dos últimos. A pesar de cerrar la parrilla, las sensaciones son mejores de lo que se esperaba.
George Russell ha terminado el 16 en su carrera de debut en el Gran Circo. Sin duda no ha sido el mejor inicio para el rookie británico pero visto lo visto en los test, el campeón de F2 del año pasado se puede dar por satisfecho al terminar.
“Estoy contento de haber traído el coche a casa sin dramas. Me siento bien físicamente y fue una buena primera carrera desde mi lado, pero obviamente es decepcionante que estemos tan atrás en ritmo. Hicimos un pit stop adicional para probar los tres compuestos de neumáticos, así que desafortunadamente es donde nos encontramos en este momento”.
“Tenemos mucho trabajo que hacer mañana para comprenderlo y, con suerte, mejorar a partir de ahí. No estoy interesado en luchar contra Robert por ser último, necesitamos trabajar juntos para hacer lo correcto. En general, puedo sentirme orgulloso conmigo mismo porque sabíamos qué esperar de este fin de semana y he logrado casi todos mis objetivos”, finaliza el británico.
Por su lado Robert Kubica ha sufrido más para traer su monoplaza al garaje. El piloto polaco completaba una carrera por primera vez desde 2010 (P17) a pesar de perder su alerón en la primera vuelta. Al entrar a box perdía toda opción a lucha y solo quedaba recoger información para mejorar el Williams.
“Definitivamente no ha sido una carrera fácil y lo sabíamos antes del inicio. Optamos por comenzar con el neumático duro para obtener experiencia con ellos, pero tuve una buena salida con esos neumáticos. En la primera curva estaba en el interior y a la salida de la curva uno de los Red Bull se movió a la derecha para evitar otro contacto y nos tocamos. Mi alerón delantero quedó dañado, así que tuve que entrar en boxes”.
“Además, en la tercera vuelta perdí uno de mis espejos. Entonces, las banderas azules no fueron fáciles. No estaba en la mejor forma con esos daños, pero sé que suena extraño y pensaba que nunca diría algo así: creo que hay algunos aspectos positivos. Quiero dar las gracias nuevamente a todos en el equipo”, expresaba para finalizar.
Imagen: @WilliamsRacing
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