El equipo Red Bull se ha establecido de manera sólida como tercer equipo esta temporada, bien diferenciado con el resto tanto con los dominadores como con el resto encabezados por Force India. Rendimiento que le permite acomodarse tras Mercedes y Ferrari, y acceder a veces al podio. Ejemplo más cercano por fecha fue el Gran Premio de Singapur, un circuito en el que tenían puesta su mira penalizando en Monza para asegurar un buen puesto en dicho trazado urbano. Aunque la prueba en el mítico circuito italiano salió mejor de lo previsto inicialmente gracias a una clasificación en mojado y un gran ritmo de carrera.

El desarrollo durante esta temporada no surtido el efecto deseado, las dificultades a principios de esta campaña supuso una pérdida que no pudo ser recuperada con la gran actualización a nivel de chasis que ha venido equipándose tras el Gran Premio de Bélgica, aparte los fallos mecánicos han sido una lacra, en especial para Max Verstappen:

“¿Qué debo hacer? Me gustaría que fuera diferente, pero puede funcionar en la vida. Sólo trato de mantenerme positivo. Tengo que ver los aspectos positivos de la temporada. Esta ha sido siempre la calificación. La velocidad está ahí. Incluso en la carrera siempre estuve en buenas posiciones antes de abandonar. Por otro lado, los resultados no reflejan lo que estoy haciendo esta temporada”, admite el piloto.

Viniendo de una temporada con un ascenso meteórico y prometedor, el joven holandés soñaba con este año. Sin embargo, tras la carrera de Spa los sueños se desvanecían. Sumaba el séptimo abandono de la temporada, a éste se une el accidente de Singapur ascendiendo la cifra a ocho. Solo un podio en el Gran Premio de China como momento más destacado. A su lado, Daniel Ricciardo sin estridencias ha ido aportando con regularidad siendo casi un habitual en la ceremonia del podio incluyendo una victoria en Baku:

“Hay un lado del garaje, por supuesto, más feliz que el otro, por todas las dificultades que tuve en el coche. Pero el coche es cada vez más rápido, somos más competitivos”

“Podemos ver por los datos de telemetría que no haga nada malo ni diferente a Ricciardo. Simplemente es gracioso que los problemas en el día de la carrera siempre aparecen sólo en mi coche”, lamenta Max.

El siempre risueño alejado de todo foco de atención debido a su discreción y su astucia desapercibida en carrera está logrando tirar del carro, salvar una temporada en definitiva. Personalmente, su compañero no cree que las puntuaciones sean correlativas en términos de velocidad pura:

“Daniel siempre fue conocido como piloto rápido en la calificación. Es muy rápido en una vuelta. Soy más rápido este año en promedio, tres a cuatro décimas de segundo más rápido que él. Esto es un montón de tiempo”.

“Se trata simplemente de experiencia. Tienes que aprender de ciertas situaciones, eventos y errores que has experimentado y hecho a ti mismo. Con 27 o 28 años voy a ser un piloto mucho mejor que yo en este momento. Porque entonces puedo juzgar ciertas cosas de manera diferente y mejor”, aclara el holandés.

Su máxima competencia este año se escapa pues, con lo que se mira hacia 2018. En esta misma entrevista publicada por el medio alemán Auto Motor und Sport, Max reafirma su fe en Red Bull. Un equipo que conoce a la perfección lo necesario para construir un coche ganador, dominaron con Sebastian Vettel a los mandos de aquellas máquinas cuya aerodinámica se desmarcaba de sus rivales:

“Espero que sí. Sin embargo, es difícil predecir en la F1 . Sólo puedo prometer: haremos nuestro mejor esfuerzo para hacer el mejor coche posible. Creo en mi equipo. Nuestro equipo técnico está en condiciones de hacerlo. Pero necesitamos todo el paquete para alcanzar nuestros objetivos altos”.

“Soy honesto y directo. No estoy mintiendo. Lo único que quiero es un coche ganador. Este no es un deseo absurdo. Estoy muy seguro de sí mismo. Si no fuera así, seguiría haciendo karting”.

Deseos de victoria. Lógicos, ya que desde su primera carrera con Red Bull no ha vuelto a poner sus pies en el peldaño más alto. Escasez de resultados producto de encontronazos con la mecánica Renault y también con sus rivales. Momento inadecuado para sus anhelos como podemos comprobar, por ello para su futuro quiere:

“Diez años dominantes para mí. El resto no es tan importante”

“No me interesan los récords de la pole o la mayoría de las victorias. Sólo quiero ganar. Entonces veremos lo que está pasando al final de mi carrera. Actualmente, sólo estoy interesado en ganar. Uno también debe tener la suerte de ganar siete títulos como Michael Schumacher. Debes estar en el equipo adecuado en el momento oportuno”, concluye Max Verstappen.

 

Autor: Pablo Bernal / @PabloBernal333

Foto: Sutton Images