El destino de Fernando Alonso para 2018 continúa siendo una incógnita sin despejar. El asturiano finaliza contrato con Mclaren Honda al término de la presente campaña, aplazando las negociaciones con Woking primero para este mes de agosto y más tarde para septiembre. Este retardo añadido con el transcurso de esta temporada tiene sus raíces tener la certeza de volver a subir a lo más alto del podio teniendo un monoplaza competitivo que le otorgue posibilidades:
“Como dije muchas veces, quiero ganar el próximo año y no quiero arriesgar mucho en ninguna decisión. Quiero estar más o menos seguro con aquello que decida”
Zak Brown admitió querer al piloto y convencerle para firmar es una prioridad. Sin embargo, el bicampeón parece no tenerlo tan claro. Esta es la tercera temporada con el equipo, cuyos frutos hasta la fecha se hallan putrefactos sin ni siquiera haber madurado. En este 2017 la situación en el seno de Mclaren Honda se ha visto agravada debido a las numerosas fallas de índole mecánica del MCL32, una unidad de potencia conceptuada en Sakura que muestra debilidades por doquier:
“Evidentemente en Mclaren de momento no somos muy competitivos y sabemos que una de las partes, el motor, no es lo suficientemente competitiva para ganar”
“Estoy seguro de que el equipo está explorando cualquier posibilidad de hacer esto competitivo y con suerte Mclaren el próximo año esté en una posición diferente. Es lo que queremos todos nosotros pero en mi caso, es independiente del motor que tengan”
“Simplemente quiero ganar. Veremos qué pasa”
Mensaje claro que lanza el español, en esta ocasión en una entrevista para Sky Sports en la víspera del Gran Premio de Europa que empieza con cambio de componentes y sanción de 32 puestos en la parrilla por consiguiente en un trazado cuya recta se extiende más de 2 kilómetros. Difícil tarea para el CEO de Mclaren si los acontecimientos se desarrollan tal que así.
Esta indecisión, o al menos así lo muestra, se deriva de otro baile de asientos que tendrá lugar próximamente. Valtteri Bottas, Carlos Sainz, Lewis Hamilton y Sebastian Vettel también cumplen con sus respectivas vinculaciones actuales. Conocedor de estos hechos, Fernando Alonso juega una de sus cartas: la política:
“Estoy muy abierto a cualquier cosa así que veremos qué trae los próximos meses para Mclaren, porque es el equipo para el que estoy corriendo ahora, un equipo que me gusta y en los últimos dos o tres años hemos realizado mucho esfuerzo todos juntos para madurar este proyecto. Veremos qué ocurre”
“Hay muchos movimientos por ahí. Sé que hay aún más de los que probablemente sepamos y hay algunos equipos que pensamos que están preparados para el año que viene, no creo que estén tan claro que estén 100% confirmados. Por lo que considero que habrá muchos cambios para el año próximo”
“Trataré de mantener la calma y escoger la mejor decisión para el año que viene”
Para tanto y para tan poco ha dado de sí estas palabras para la cadena británica. Si bien ha ratificado sus intenciones, su 2018 aún queda desdibujado y sujeto a miles de especulaciones con mayor o menor base en la deducción. El hambre de victoria parece tenerlo inmaculado a pesar de haber transcurrido ya 4 años desde su última victoria y encontrarse en el ocaso de su carrera en F1.
Autor: Pablo Bernal / @PabloBernal333
Foto: IndyCar Verizon Series
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